
Misa de Luján: García Cuerva sobre la pobreza y la indiferencia social.
La Misa de Luján con fuertes mensajes en defensa de los más humildes
En la misa de Luján, el arzobispo de Buenos Aires, García Cuerva, abordó la grave situación que atraviesan miles de argentinos. Hizo un llamado a la comunidad para no ser indiferentes ante el sufrimiento causado por la pobreza y el narcotráfico.
Durante su discurso, expresó: Hay muchos hermanos en nuestro país que ya no tienen fuerzas para seguir, no encuentran sentido al camino de sus vidas y han detenido su marcha. Les pesa demasiado la pobreza, las consecuencias del narcotráfico, las enfermedades, la soledad.
Estas palabras resuenan en la necesidad de abordar urgentemente estas problemáticas que afectan a sectores vulnerables de la sociedad.
La misa no solo fue un acto religioso, sino también un espacio de reflexión sobre la realidad de los jubilados, discapacitados, y aquellos que enfrentan la soledad y la violencia. La comunidad fue convocada a caminar juntos, no solo en la fe, sino en un compromiso activo por la patria.
Un llamado a la acción
García Cuerva enfatizó: No queremos ser un pueblo indiferente ante tanto dolor.
Estas afirmaciones subrayan la importancia de una respuesta colectiva, instando a la población a ser parte de un esfuerzo conjunto para aliviar el sufrimiento de los más necesitados y a construir un futuro esperanzador y solidario.
A medida que nos enfrentamos a desafíos sociales críticos, el mensaje del arzobispo es un recordatorio de la importancia de la empatía y la acción, que debe resonar en cada rincón del país. La fuente se indica al final con Instagram.



