
Imagen de Empresarios mendocinos se funden pero con optimismo
El último índice de ventas minoristas de la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME) arrojó que, en el mes de junio, la primera mitad del año cerró con la caída más grande desde febrero de 2024. En Mendoza, la evaluación de los empresarios y expertos locales coincide en que esto se replica en la provincia, pero no se pierde el optimismo a futuro.
Los datos del ente nacional de empresarios marcaron una disminución mensual de ventas minoristas del 6,7%, que sólo fue superada por los resultados de febrero del año pasado, cuando la caída fue del 7,4%.

Adrián Alín, presidente de la Cámara de Empresarios de Comercio, Industria, Turismo y Servicios de Mendoza (Cecitys), indicó que los empresarios comenzaron a sentir la crisis en las ventas “a partir del 15 de febrero”, donde relató “una caída abrupta” de las ventas en las pymes mendocinas.
En el gráfico de CAME, el mes de febrero de este año marcó la primera gran disminución comercial, solo superada por junio.
“Algunos rubros han bajado (sus ventas) hasta el 40%”, alertó el empresario.
A esta valoración, Juan Enrique Viciana, presidente de la Unión Comercial e Industrial de Mendoza (UCIM), agregó: “Todos estamos viendo que estamos transitando un año muy difícil. El año pasado fue muy difícil”.
La situación empujó a los empleadores a plantear una caída del empleo, donde ya comenzaron a darse despidos. Alín enfatizó: “Las empresas están en crisis. Ya empiezan a despedir gente”.
“Lo que está pasando es que está habiendo un cambio de hábitos en las compras. No solamente por la gente que compra en el exterior, en el caso nuestro en Chile, también internamente se está generalizando las compras por medios electrónicos”, advirtió Viciana.
“Chile tiene todas esas cosas porque generó una confianza a nivel mundial. Porque han cambiado ya cuatro o cinco veces de signo de Gobierno, y no tocan los criterios. Los grandes lineamientos de la economía no los tocan. Entonces, se gana la confianza del mundo“, profundizó el presidente de la UCIM.
Sobre el crecimiento de las ventas por internet, el economista mendocino Carlos Rodríguez indicó que este factor de “la importación directa puede estar golpeando a estos sectores”.
El presidente de Cecitys sumó: “Está la economía fría, el jubilado no tiene, el empleado público no tiene, el privado no tiene, entonces no tenés consumo”.
Los cambios en el consumo local, y que la capacidad de compra se haya visto diezmada, son factores que directamente se vieron replicados en los registros de ventas de la economía local.
El economista subrayó que “este modelo tiene ganadores y perdedores netos, esto hace que esté un sector de la sociedad, sienta el impacto de la caída de los ingresos”, y aseguró que “esto se va a mantener así hasta que esto se ‘normalice’ y el modelo pueda ofrecer mejores alternativas”.
Además, enfatizó en el riesgo que suponen las importaciones: “Hay sectores de la industria nacional que están muy golpeados y van a estar más golpeados por el tema de las importaciones”.
Los sectores “en peligro”
El informe de CAME diferenció 7 apartados dentro de las ventas minoristas de la economía nacional.
Estos presentaron variados resultados en la medición interanual, aunque en la acumulada se registró un crecimiento de todas y en la intermensual una caída de todas.

Los únicos dos sectores que marcaron bajas en la métrica interanual durante el mes de junio fueron “Calzado y marroquinería“, con un -5,2%, y “Textil e Indumentaria”, con –4,7%.
Por su parte, Alín señaló que “tanto la gastronomía, la hostelería, el comercio, las pequeñas y medianas, se están sintiendo afectadas porque no hay consumo, no hay plata”.
Viciana agregó al panorama a los comercios mayoristas dentro del rubro de la construcción: “Los que vienen mal, y se ve que no repuntan, son los, sobre todo, los negocios mayoristas que abastecen al segmento de la construcción”.
En la venta de materiales de esta actividad, se registró una diferencia entre lo enunciado por el presidente de la UCIM sobre grandes mayoristas y los corralones locales, focalizados más en abastecer trabajos más pequeños. Estos últimos indicaron estar empezando a ver una reactivación en sus ventas.
Buenas expectativas a futuro
A pesar de los problemas expuestos por los actores de la economía mendocina, el informe de CAME incluyó un apartado en el que los propios empresarios compartieron sus valoraciones.

Primero, sobre la evaluación de la situación actual en comparación con el año pasado. En esta, los resultados marcaron una mayoría del 58,3% que sostuvo que “se mantuvo” la situación sin grandes cambios. Como segunda opción más votada, el 27,5% de los empresarios alertaron que “empeoró“, y finalmente un 14,2% indicaron a CAME que, en sus casos, las ventas mejoraron.
La otra consulta presentada a los empresarios fue sobre cómo esperan que evolucionen los registros para “dentro de un año”. Es decir, las expectativas.
Con un 50%, la opinión más elegida fue que se cree que el contexto en 2026 será “Mejor“; en segundo lugar, el 42,2% de los consultados consideró que la situación se mantendrá “Igual“, y por último, solo un 7,8% cree que se profundizará la caída del consumo.
Los empresarios mendocinos, quienes como presidentes de sus organismos también conocen la opinión de sus afiliados, coincidieron en la valoración positiva para el futuro cercano.
Ante la consulta de este diario por la previsión de CAME, el presidente de la UCIM indicó que, a pesar de las dificultades expuestas, la postura puertas adentro de la Unión Comercial e Industrial local es de “mucha expectativa este hacia el año que viene“. Y profundizó: “Todos estamos haciendo un esfuerzo que vale la pena para un futuro mejor”.
Como respuesta a la misma interrogante, el titular de Cecitys compartió: “A pesar de la mala situación, estamos siempre inventando algo como para ilusionarnos que de esto se va a salir”.
No obstante, Alín continuó su devolución con un alarmante mensaje: “En las últimas reuniones de comisión directiva, dicen, ‘bueno, yo para sostenerme, de cinco locales voy a cerrar tres o voy a despedir el 10% de los empleados paulatinamente’”.
Por su parte, Rodríguez sostuvo que, a su entender, “la mayoría de los empresarios, que ven con beneplácito las reformas que se están intentando hacer, tienen un panorama más optimista para el futuro”.
Fuente: El Sol



