
Un repartidor de apps en bicicleta enfrenta la exigencia de múltiples entregas diarias
En medio de la crisis que atraviesan los repartidores de aplicaciones en Argentina, varios trabajadores describen las duras condiciones físicas y económicas que enfrentan a diario. Desde C5N, deliverys señalaron que «es difícil trabajar con tanto peso encima y sumarle la presión de querer todo el tiempo de hacer más plata».
Uno de los repartidores detalló que, pese a las jornadas extenuantes, que a veces demandan hasta diez horas continuas, el esfuerzo es intensificado por la necesidad de realizar un enorme volumen de entregas para alcanzar un ingreso básico viable. Expresó también la solidaridad que existe entre colegas para aliviar la carga cuando algún pedido es demasiado pesado, ya que «si no realizás la entrega, tenés una penalización en la aplicación».
Además, explicó que muchos complementan sus ingresos con un segundo trabajo nocturno debido a la insuficiencia de las ganancias diarias, que rondan entre 20 y 30 mil pesos, cifra que depende directamente de la cantidad de entregas efectivas. Esto revela las severas dificultades para que los trabajadores independientes puedan sostener un nivel de vida digno en el contexto actual.
Perspectivas y desafíos del trabajo independiente en plataformas digitales
La necesidad de realizar cerca de 460 entregas al mes para poder vivir como delivery pone en evidencia los límites y exigencias que enfrenta este sector emergente de la economía. Las largas jornadas y la presión por cumplir metas generan un desgaste físico y emocional considerable, afectando la calidad de vida de quienes conforman este sistema laboral precarizado.
Este escenario subraya la importancia de una regulación que contemple las condiciones de trabajo, la protección social y los derechos de los repartidores, fortaleciendo el rol del Estado ante la creciente tercerización y precarización del trabajo. La fuente completa del testimonio se encuentra en Instagram.



